Se sentia totalmente estúpida. Todo en lo que ella había
creido se estaba desvaneciendo en un segundo. Estaba en ese sitio en el que
había estado miles de veces pero esta vez erea diferente, el estaba ahí, con
ella. Decia cosas sin sentido, le contaba cosas que el no tendría que saber,
NUNCA. Pero se las estaba contando, el se estaba quedando atonito, pero a la
vez estaba contento, o eso creía ella al menos. El se sento apoyado en la
pared, la miro y le dijo que se sentara esntre sus piernas, los dos mirando al
frente, abrazados. Palabras palabras y mas palabras salian de sus bocas.
Palabras que quizás nunca deverian de haber sido pronunciadas, secretos que
nadie sabia. Palabras solo había palabras y pequeñas confesiones de lo que
realmente sentían. “ Prometeme que pase lo que pase no le diras a nadie nada de
lo que pase aquí”. Entonces se acordó de ella, otra ella. Se dio cuenta de que
el ya tenia novia y que aquello que estaba haciendo no era bueno. Pero el la
cogió del mentón, sabia que no podía resistirse a esos ojos ni a esos labios.
El la beso, quizás no fue el mejor beso del mundo pero fue un beso. El se
aparto pero ella no quería deshacerse de esos labios que acababa de recuperar.
Eran sus labios los que le daban fuerzas
para seguir adelante. Y le busco otra vez, un besito y el sonrio picaronamente.
La miro y ella a el también. El seguía con esa sonrisa bobalicona que siempre
le salía. Tras otro intento ella consigio besarle. Se apartaron, quizás ese
podía ser el momento mas bonito de sus vidas. Pero apareció un amigo,
descompuesto. El tenia novia y ella le estaba besando. Se oculto tras sus
brazos y se fue, avergonzada. Lloro toda la noche, no podía creerse lo que
acababa de hacer. Habia besado al chico de su vida pero lo había hecho mientras
el tenia novia. Nada iba a salir bien. Por todo por lo que ella había luchado
para no convertirse en alguien asi y en una noche lo había destrozado todo.